La Universidad de Delaware encuentra la fórmula de reacción que haría descender dramáticamente los costes de este tipo de coches
Un equipo de investigadores dirigidos por Yushan Yan, de la Universidad de Delaware, se ha planteado qué hace falta realmente para que un coche de hidrógeno sea asequible. Esta pregunta incluye tanto fundamentos de ingeniería como de economía.
Las pilas de combustible pueden ser la mejor opción para alimentar vehículos sin emisiones en los próximos años. Por ejemplo, Toyota acaba de presentar en Japón un coche impulsado por hidrógeno, que esperan comercializar en Estados Unidos a lo largo de este año.
Electrocatalizadores alternativos
Yan y su grupo ha estado trabajando en un nuevo tipo de células de combustible basadas en polímeros alcalinos que resultan mil veces más baratos que el platino. ¿El problema? Que el uso de estos polímeros alcalinos conlleva un pH alto, lo cual ralentiza mucho la reacción, hasta 100 veces en comparación con un ambiente ácido, al otro lado de la escala del pH. Por tanto, para poder crear electrocatalizadores más baratos y que sean rápidos en un ambiente alcalino, era necesario conocer cómo se desarrolla exactamente la reacción y cuáles son sus mecanismos esenciales.
Aquí es donde entran en juego Yan y su grupo de investigación, cuyo trabajo, publicado ayer en la revista Nature Communications, ayuda a situar los mecanismos básicos de la reacción de las células de combustible hechas con platino.
Después de muchas pruebas, hallaron que la llamada «energía de enlace de hidrógeno», la cantidad de energía que se libera cuando una molécula de hidrógeno se adhiere a una superficie metálica, es el factor más importante para predecir la velocidad de la reacción.
Esto constituye la información esencial que ayudará a otros investigadores a diseñar y crear nuevos electrocatalizadores alternativos, lo que aumenta las probabilidades de poder adquirir, en pocos años, un coche de pila de hidrógeno asequible.
Fuente: eldiariomontanes.es